La Fotonovela como soporte de obra.
El año 2004 decidí dar comienzo a un proyecto editorial que tendría por objetivo principal adaptar el formato fotonovela a las acciones de arte que para ese entonces yo, mas un nutrido equipo de artistas, realizábamos de manera constante en los espacios públicos de la Octava Región y Capital de Chile. Hasta el día de hoy el proyecto cuenta con seis publicaciones las que terminaron de ser impresas en Chile a finales del año 2009. En principio, y desde su objetivo básico, la obra concebía tres intenciones fundamentales:
1 – Unir los fragmentos de obras (acciones de arte) anteriores para re – articular un nuevo discurso.
2 – Generar circuitos alternativos para el desplazamiento de la obra plástica.
3 – extender la obra del artistas hacia los procesos de producción.
Centrándonos solamente en el primer punto, diré que el formato fotonovela me permite capturar una dispersión de imágenes de significados relativamente incompletos otorgadas por la serie de acciones de arte realizadas en la calle o espacios rural – urbanos, para armar un extenso rompecabezas o nueva versión de los hechos, propiciando un cuento – historia, o nueva narración inventada de carácter lineal o “no – lineal”. Tal situación, nos conducirá a insospechados hechos que delimitaran tanto el curso significativo de las imágenes, cómo el desarrollo de un tipo particular de narrativa.
Por tanto, La variedad de Happening, performance u acciones de arte realizadas en la calle, serían reductos en primera instancia del instinto, para luego estas movilizarse mediante un plan azaroso (despojado de un riguroso guión de acción) y encontrar una parcial extensión y nido simbólico en la conformación de una fotonovela, dispositivo que además asumiré cómo una «Máquina del Tiempo» que me permitirá ir al encuentro y caza de la memoria de mis acciones de arte.
«Las fotonovelas de luís almendra son el registro de situaciones performáticas, donde él y los artistas invitados asumen personajes y narraciones delirantes, en paisajes o montajes teatrales. El humor, un imaginario que recoge fantasmas, arquetipos y mitologías tanto personales como colectivas, el poder de la poseía y la confrontación de sus personajes, se pueden conocer a través de estas publicaciones realizadas entre el 2004 y 2009». Carolina Lara.
«Sus fotonovelas de excelente factura. Allí transita por mundos irreales y evoca las mas complejas e intensas reflexiones a través de un lenguaje tan gore como lúdico». Diario el sur.
«Fue a sí que se convirtió en ese ser mitológico, lúdico y siniestro, que protagoniza una serie de fotonovelas». Carola Lara. revista bufé magazine.
«Pero no he mencionado de manera suficiente el esfuerzo editorial de Luís Almendra, que se hizo famoso auto produciendo fotonovelas – post – surrealistas -para – conceptuales». Justo Pastor Mellado.
Link revista Arte Y Crítica “Fotonovela en frecuencia modulada” –
http://arteycritica.org/huachistaculo-fotonovela-en-frecuencia-modulada/